En
1942 comenzó la odisea de "Las Casicas", o viviendas ultrabaratas del
Camino de Las Fuentes, como un experimento del nuevo Régimen a la hora
de llevar a la práctica en el municipio de Zaragoza sus políticas de
vivienda para pobres. Se trataba de unos terrenos de propiedad municipal
situados en las traseras del nuevo Macelo, en el cruce del camino de
Las Fuentes con el camino de Las Fillas, que entonces era como decir
"bien lejos". La tipología de viviendas sería la apropiada para unas
gentes que hasta ese momento vivían en cuevas y graveras del extrarradio
de la ciudad, en condiciones incalificables para el escaso espacio de
que disponemos aquí. Como no se podía hablar de "justicia social" (eso
es marxismo), se hablaba de "Caridad", pero caridad para pobres. Así, el
proyecto, de unas 40 viviendas unifamiliares, estaba sustentado en unas
calidades de materiales también ultrabaratos, ultrapobres. No hay
memoria del arquitecto que las diseñó, ni apenas documentos sobre su
expediente de tramitación. Intentaban ser un remedo de las casitas de la
"Ciudad Jardín", pero se quedaron a varias galaxias, en casi todos los
aspectos.
En abril de 1943 fueron entregadas a las familias
beneficiadas, en condiciones de arriendo a razón de 35 pesetas al mes.
Las dotaciones de infraestructuras en la zona estaban parejas al nivel
ultra(pobre). En 1946 fueron levantadas 75 viviendas más, similares a
las previas. La rápida degradación en las condiciones de habitabilidad,
llevaron a su derribo posterior, y a levantar, al comienzo de los años
60 del pasado siglo, ya en la época del "desarrollismo verticalista"
nuevas edificaciones en su lugar, en la actual manzana entre Compromiso
de Caspe, y Batalla de Pavía.
En la imagen, las viviendas
ultrabaratas al lado del Camino de las Fuentes. Al fondo, el aspecto
periurbano de la zona del camino de las Fillas y su confluencia con
Miguel Servet.
0 Comentarios